Sabemos de dónde venimos, a que nos enfrentamos, pero tenemos muy claro a dónde queremos llegar: a la Excelencia. Al podio donde están los mejores. Si, somos ambiciosos, la competencia no nos asusta, al contrario nos estimula.
Tenemos los mejores ingredientes: uvas y equipo. Nuestro tesoro, la viña de cepas centenarias, esas que se fueron abandonando poco a poco por la dificultad de mecanizar su cultivo o simplemente se sustituyeron por otras de mayor producción.